Por qué desarrollar una estrategia de nube
Reemplazar las soluciones de software locales con tecnología basada en la nube puede ayudar a las empresas a establecer y mantener una ventaja competitiva en el mercado. Esto se debe a que las soluciones basadas en la nube brindan la infraestructura informática más efectiva basada en financiamiento, flexibilidad, confiabilidad, escalabilidad y seguridad.
Los beneficios inherentes producidos por la computación en la nube han creado una tendencia en la que un número creciente de CFO y CIO están invirtiendo activamente en una estrategia de nube que puede respaldar varios resultados comerciales, incluido un menor riesgo, mayor eficiencia, productividad mejorada y agilidad comercial.
Impulsores que causan el cambio a la computación en la nube
Hay varios factores que están impulsando el cambio a la nube. Las empresas creen que el costo actual del software tradicional es desproporcionado con respecto al valor que proporciona. Pagar por el software y la infraestructura ahora está siendo “rechazado” a la luz de los servicios y soluciones emergentes de computación en la nube.
Además, las empresas de menor riesgo quieren una relación más tangible entre el beneficio del software y su costo. El impulso para reducir el riesgo exige una mayor previsibilidad del costo de propiedad y los costos de mantenimiento continuo asociados de las soluciones de software de una empresa. La computación en la nube también mejora las estrategias de sostenibilidad operativa para la infraestructura crítica, lo cual es una preocupación creciente cuando se considera la reducción de riesgos en un nivel más profundo.
En general, las soluciones en la nube admiten una mayor eficiencia y, a menudo, vienen con un conjunto de características estable más sólido, capacidades mejoradas, todo sin software. Las empresas a menudo se enfrentan a una intensa presión para reducir el costo de compra y mantenimiento de las soluciones de software en las instalaciones, que pueden sumar rápidamente hasta cuatro veces el costo de capital original. Dado que los recursos y la mano de obra ya no son necesarios para respaldar las antiguas soluciones en las instalaciones una vez que se implementa la computación en la nube, la mano de obra y los recursos que antes se requerían se pueden reenfocar en las tareas comerciales centrales.
La tecnología en la nube promueve la agilidad empresarial. El valor de las soluciones ya no solo está determinado por la funcionalidad, sino también por la facilidad de uso, la experiencia del usuario y la posibilidad de administrar su solución basada en la nube desde cualquier lugar. Ahora las empresas pueden estar en cualquier lugar, sin estar atadas a un escritorio y, debido a la migración actual a la digitalización y al trabajo remoto, esto ahora es una necesidad.
Los componentes de la computación
en la nube A medida que la computación en la nube se vuelve más predominante, hay mucha discusión sobre cómo definir la computación en la nube como un modelo de computación. Se han publicado y debatido modelos de madurez, y los proveedores claramente tienen un modelo para sus propios productos.
Inicialmente, la computación en la nube se trataba de la capacidad de ahorrar costos operativos. Este puede ser o no el caso y depende de cada negocio y sus puntos débiles. Las métricas actuales que juegan un papel en la determinación del valor de la computación en la nube son:
- experiencia de usuario
- facilidad de uso
- reducción de gastos de capital
- transferencia a costos operativos
- ahorro de costes
- la reducción de riesgos
- aumento de la productividad
- aumento de la eficiencia
- agilidad empresarial
Al considerar la tecnología de la nube, es esencial calcular el ahorro de costos real que la computación en la nube puede aportar a su negocio. Las empresas no solo deben calcular cuánto dinero se puede ahorrar, sino también cuánto costará ahorrar ese dinero y compararlo con el costo asociado con las aplicaciones locales.